San Martín
Texmelucan, Pue. El Alcalde Rafael Núñez Ramírez y el Regidor de
Desarrollo Rural, Agricultura y Ganadería, Emilio Flores Olguín, dan el
banderazo de inicio del programa de reforestación 2014 y el inicio de los
trabajos del rescate del Vivero municipal “Iliyucan”.
Dicho acto se realizó en las instalaciones del vivero, donde se dieron
cita autoridades municipales, ejidatarios, directores y comités de padres de
familia de escuelas, lugar donde Emilio Flores Olguín dio la bienvenida a los
asistentes y resaltó la importancia de realizar labores de reforestación en la
comuna, acción que será coadyuvante para mejorar el medio ambiente.
Dijo que el Ayuntamiento ha
empezado a distribuir especies de árboles, como el cedro blanco, casuarinas,
jacarandas y fresnos para reforestar instituciones educativas, algunas áreas
verdes de los ejidos y embellecer la ciudad de Texmelucan, agradeció el apoyo a
Noé Lozano Álvarez, director de Desarrollo Rural, ya que sin su apoyo no podría
haber realizado las acciones para la reforestación.
Mientras que el presidente municipal Rafael Núñez Ramírez dio a conocer
que se realizan trámites para recibir mil 200 arbolitos de diversas especies y
adquirir la especie nativa y representativa del municipio el Texmol Quercus frutex para reproducirla y expandirla por las
zonas verdes de la ciudad, de esta manera se pretende rescatarla especie y
darla a conocer entre los texmeluquenses.
Aseveró que en tres años no se había realizado trabajo alguno en el
vivero, por ello, se va a rehabilitar, en conjunto con los Boys Scouts se
implementaran cursos de iniciación a niños para que aprendan la importancia de
reforestar y reproducir alimentos, y acudan regularmente a cuidar y ver los
avances de sus plantas, inculcándoles la cultura de cuidar el medio ambiente.
Cabe mencionar que el alcalde y el regidor entregaron simbólicamente
arboles al Centro Escolar “General Rafael Ávila Camacho”, nivel primaria, Secundaria
Técnica número 61 y Escuela Progreso, así como a ejidatarios de las juntas auxiliares.
Por: Cecilia
Espinoza Galindo.
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