Huejotzingo
de Nieva, Pue.
Quedo reparada la cúpula de la torre del campanario de la Parroquia de San
Miguel Arcángel de la Ciudad de Huejotzingo, la cual fue dañada tras caerle un
rayo el pasado 1 de Junio al caer una fuerte lluvia en la zona, mientras queda
pendiente la reparación del reloj que se ubica en el centro del inmueble.
Fue la tarde-noche
del miércoles 1 de junio que se registró una fuerte lluvia que fue acompañado
de rayos, cuando de momento se escuchó
un fuerte tronido y un resplandor de luz en la zona de la iglesia, las personas
al verificar lo ocurrido, se percataron que un rayo había caído sobre la cúpula
del campanario, sin que se registraran lesionados, mientras que autoridades
municipales acordonaron la zona.
El rayo daño metro y medio de la estructura de la parte alta del
campanario, también ocasiono que el reloj que se ubica en el acceso principal
del templo católico se descompusiera, por lo que de tratarse de un inmueble
histórico, Protección Civil Municipal y la Dirección de Obras Públicas del
Ayuntamiento solicitaron al Instituto Nacional de Antropología e Historia
(INAH), delegación Puebla, la realización de una inspección y valoración de la
estructura para que se pudieran hacer las reparaciones sin problema alguno.
Tras mes y medio, los
trabajos de rehabilitación del inmueble han sido concluidos, que de acuerdo a
Cándido Deolarte Morales, Presidente de la Comisión Central de San Miguel
Arcángel, las labores de la nueva cupulilla del templo católico se realizaron
de acuerdo a los lineamientos del INAH, y en la parte alta se ha colocado un
pararrayos con un radio de 120 metros y un diámetro de 240, que permitirá
proteger el inmueble ante las inclemencias del tiempo.
Los feligreses católicos
señalaron que sólo queda pendiente la reparación del reloj que se ubica en la
parte central del templo, la cual será valorado y reparado por especialistas de
la Ciudad de México, donde se espera que antes del 29 de Septiembre, que es la
fiesta patronal de San Miguel Arcángel, quede totalmente reparado y se espera
que sigan dándose aportaciones voluntarias para cubrir los gastos.
Por: Ascención Benítez Sánchez.
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