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jueves, 21 de marzo de 2019

FAMILIA DE ZECALACOAYAN CONSERVA TRADICION DE TEMPORADA DE CUARESMA


San Martín Texmelucan, Pue. Por tres generaciones integrantes de la Familia Flores de la comunidad de San Nicolás Zecalacoayan ha tocado el cuerno de vaca o toro durante la temporada de cuaresma en calles, capillas y templos de las diferentes localidades de la región de Texmelucan, que avisa a la gente la proximidad de la Pasión, crucifixión y resurrección de Jesús.
Fue en calles aledañas al mercado municipal de Texmelucan, donde Don Moisés Flores Pérez, originario de San Nicolás Zecalacoayan del municipio de Chiautzingo, se encontraba tocando el cuerno de toro para emitir un sonido parecido a las trompetas de la antigua Jerusalén, lo que llama la atención de las personas que caminaban por el lugar, quienes se detenían para observarlo y regalarle una moneda, así como comerciantes le pedían que se acercara a su negocio para escucharlo.
Don Moisés, quien dijo tener 20 años efectuando esta actividad, señaló que ya son tres generaciones de la Familia Flores que han realizado dicho sonido previo a la semana santa, es decir que su abuelo le enseñó a su papa y este se lo transmitió a él, la tradición de tocar el cuerno en miércoles de ceniza, los seis viernes de cada semana y durante los días de semana santa, y desafortunadamente esta acción puede perderse porque sus hijos no quieren aprender.
Explicó que al cuerno de toro o vaca se le coloca una boquilla para poder emitir un sonido con un fuerte soplido de aire, que es combinado con tiempos largos y cortos, que se escucha en ocasiones desgarrador, con tristeza o llanto, anunciando que se acerca la semana santa, donde nuestros señor Jesús fue aprendido, castigado y crucificado, por consecuencia son días en los que uno se debe preparar para ser partícipes de un acto solemne de los católicos.
Finalmente Moisés Flores Pérez agregó que son pocas las personas que aún se dedican a tocar el cuerno en cuaresma y semana santa, por lo que al salir a las calles llama la atención de las personas de todas las edades, quienes a cambio les fan una moneda como una forma de agradecimiento, incluso algunos les toman fotografías o los graban en video para que quede en el recuerdo y enseñarles a las futuras generaciones esta tradición católica.
Por: Ascención Benítez Sánchez.

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